http://ethic.es/2015/12/el-poder-de-compartir/
El trueque nació en el Neolítico. Herramientas de sílex, lanzas, zapatos, collares o productos agrícolas disponibles para intercambiar en pequeños mercados. Hoy el escenario es Internet, que ha permitido, 10.000 años después, recuperar la confianza como moneda de cambio. Bienvenidos a la revolución de la economía colaborativa.